La obesidad es una enfermedad crónica que se caracteriza por un exceso de grasa corporal, pero no es una sola; se divide en categorías. Esta condición puede tener graves consecuencias para la salud. Su medición y clasificación son cruciales para establecer las estrategias de manejo y tratamiento más adecuado. ¿Quieres saber qué grado de obesidad tienes? En este blog, te contaré cómo se mide la obesidad, los distintos grados de obesidad existentes, sus implicaciones y las opciones de tratamiento disponibles.
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¿Qué formas existen para saber si alguien tiene obesidad?
Para determinar si alguien tiene obesidad, utilizamos varias herramientas y mediciones que nos permiten evaluar el exceso de grasa corporal y sus posibles impactos en la salud. Las más comunes son:
Índice de Masa Corporal (IMC)
Es la herramienta más utilizada para clasificar el sobrepeso y la obesidad en adultos. Se calcula dividiendo el peso de la persona (en kilogramos) por el cuadrado de su altura (en metros). Un IMC de 30 o más se considera obesidad.
Medición de la circunferencia de la cintura
Esta medición ayuda a evaluar la grasa abdominal, que es un importante factor de riesgo para enfermedades relacionadas con la obesidad y el sobrepeso. Una circunferencia de cintura superior a 102 cm en hombres y 88 cm en mujeres se considera de riesgo.
Análisis de composición corporal
Métodos como la bioimpedancia eléctrica, la densitometría ósea (DEXA), y la tomografía computarizada (TC) o la resonancia magnética (RM) pueden proporcionar una estimación detallada de la composición corporal, incluyendo el porcentaje de grasa corporal.
Evaluación clínica
Incluye la historia clínica, el examen físico y, si es necesario, pruebas de laboratorio para evaluar las comorbilidades asociadas con la obesidad, como la hipertensión arterial, los niveles elevados de colesterol y la diabetes.
Estas herramientas, utilizadas en conjunto, nos ofrecen una imagen completa del estado de salud del paciente y nos permiten diseñar el plan de manejo más adecuado para cada caso.
IMC, la medición que define los grados de obesidad
Como se mencionó anteriormente, el Índice de Masa Corporal (IMC) es una herramienta de cálculo que se utiliza ampliamente en la medicina para evaluar y clasificar el estado de peso de los individuos y, por extensión, identificar posibles riesgos para la salud relacionados con el peso corporal. Es una fórmula que relaciona el peso de una persona con su altura, proporcionando así un indicador simple y práctico de la distribución de grasa corporal que es aplicable a la mayoría de los adultos, tanto hombres como mujeres.
Cómo se calcula el IMC
El IMC se calcula dividiendo el peso de la persona en kilogramos por el cuadrado de su altura en metros (kg/m²). La fórmula es:
- IMC= Peso en kilogramos ÷ (Altura en metros)²
Este cálculo produce un número que generalmente se interpreta usando una escala estándar para clasificar si una persona tiene un peso bajo, normal, sobrepeso u obesidad.
Clasificación del IMC según la OMS
La Organización Mundial de la Salud (OMS) clasifica los rangos de IMC de la siguiente manera:
- Bajo peso: IMC menor de 18.5.
- Peso normal: IMC de 18.5 a 24.9.
- Sobrepeso: IMC de 25 a 29.9.
- Obesidad grado I: IMC de 30 a 34.9.
- Obesidad grado II: IMC de 35 a 39.9.
- Obesidad grado III (obesidad mórbida): IMC de 40 o más.
Limitaciones del IMC
El IMC no considera la distribución de la grasa en el cuerpo; la grasa abdominal (visceral) es más peligrosa para la salud que la grasa ubicada en otras áreas. Por lo tanto, otras mediciones, como la circunferencia de la cintura, a menudo se utilizan junto con el IMC para obtener una evaluación más precisa del riesgo para la salud. De igual manera, la medición con el IMC sólo distingue el peso corporal y no diferencia qué porcentaje de ese peso es músculo y qué porcentaje es grasa. Si bien esta es una prueba casera útil para dar un diagnóstico inicial, debe ser complementado con otras evaluaciones y exámenes médicos para obtener una comprensión completa del estado de salud de una persona y guiar adecuadamente las intervenciones de salud.
Ejemplos de IMC
Ejemplo 1: persona con peso normal
Supongamos que tenemos a una persona que pesa 70 kg y mide 1.75 metros de altura. Para calcular el IMC:
- Altura en metros al cuadrado: 1.75×1.75=3.0625 m²
- Peso dividido por altura al cuadrado: 70÷ 3.0625≈22.863.0625
El IMC de esta persona es aproximadamente 22.86, lo que indica que se encuentra en el rango de peso normal según la clasificación de la OMS.
Ejemplo 2: Persona con Sobrepeso
Consideremos ahora a una persona que pesa 85 kg y mide 1.70 metros de altura. Para calcular el IMC:
- Altura en metros al cuadrado: 1.70×1.70=2.89 m²
- Peso dividido por altura al cuadrado: 85÷ 2.89=29.41
El IMC de esta persona es aproximadamente 29.41, situándola en el rango de sobrepeso.
Ejemplo 3: Persona con Obesidad Grado I
Finalmente, veamos el caso de alguien que pesa 95 kg y mide 1.60 metros de altura. Para calcular el IMC:
- Altura en metros al cuadrado: 1.60×1.60=2.56 m²
- Peso dividido por altura al cuadrado: 95÷ 2.56=37.112.56
El IMC de esta persona es aproximadamente 37.11, lo que indica obesidad grado I.
Grados de obesidad
La obesidad es una condición de salud global que ha alcanzado proporciones epidémicas en el siglo XXI y tomado relevancia por los sistemas de salud de países de todo el mundo. Tal como vimos anteriormente, la clasificación de los grados de obesidad se basa en el Índice de Masa Corporal (IMC). Esta clasificación funciona también como guía en la selección de las intervenciones de tratamiento más apropiadas.
En el camino hacia un manejo integral de la obesidad, es esencial adoptar un enfoque multidisciplinario que incluya cambios en el estilo de vida, intervenciones médicas y, en algunos casos, procedimientos quirúrgicos. Sin embargo, antes de adentrarnos en las estrategias de manejo, debemos comprender la clasificación y las características que definen a cada grado de obesidad.
Grados de obesidad: Obesidad grado I
El grado de obesidad tipo I se define por un Índice de Masa Corporal (IMC) que se encuentra entre 30 y 34.9 kg/m². Este rango indica una acumulación de grasa corporal que supera lo considerado saludable y representa el primer nivel dentro de la categorización clínica de la obesidad. Las personas con obesidad tipo I enfrentan un aumento en el riesgo de desarrollar varias enfermedades crónicas y condiciones de salud adversas en comparación con aquellas que tienen un peso normal o incluso un sobrepeso.
Enfermedades asociadas a la obesidad grado I
La obesidad tipo I está vinculada con un riesgo incrementado de desarrollar una serie de condiciones de salud, incluyendo, pero no limitándose a:
- Diabetes tipo 2: La resistencia a la insulina es más común en personas con obesidad, lo que puede llevar al desarrollo de diabetes tipo 2.
- Enfermedades cardiovasculares:Incluyendo hipertensión arterial, enfermedad coronaria y accidente cerebrovascular, debido a la mayor carga que el exceso de peso impone al corazón y al sistema vascular.
- Apnea del sueño: El exceso de grasa, especialmente en la zona del cuello, puede obstruir las vías respiratorias durante el sueño.
- Algunos tipos de cáncer: PExiste una relación entre la obesidad y el riesgo elevado de ciertos cánceres, como el de endometrio, colon y mama.
- Riesgos y complicaciones quirúrgicas: Como cualquier procedimiento quirúrgico, el slim gástrico conlleva riesgos de complicaciones, como infecciones, problemas en las suturas, o intolerancia a ciertos alimentos. Sin embargo, estos riesgos son relativamente bajos y se minimizan con un seguimiento médico adecuado.
- Posibles deficiencias nutricionales: La reducción en la capacidad de ingesta de alimentos puede llevar a deficiencias de vitaminas y minerales, lo que requiere que los pacientes tomen suplementos nutricionales de por vida.
Manejo médico de la obesidad grado I
El manejo de la obesidad tipo I generalmente se enfoca en cambios de estilo de vida sostenidos, con el objetivo de reducir el peso corporal y mejorar la salud general. Esto incluye:
Asesoramiento nutricional para adoptar una dieta equilibrada baja en calorías, pero rica en nutrientes.
Se recomienda la incorporación regular de actividad física moderada a intensa, adaptada a las capacidades y condiciones de salud de la persona.
Muchas personas se benefician del apoyo psicológico para abordar los comportamientos alimentarios y el estrés emocional que puede contribuir a la obesidad.
En algunos casos, se pueden considerar procedimientos no quirúrgicos, como el balón intragástrico, o quirúrgicas como las cirugías bariátricas para la pérdida de peso.
Consideraciones adicionales
- Monitoreo y seguimiento: El seguimiento regular por parte de profesionales de la salud es crucial para ajustar el plan de manejo según sea necesario y para brindar motivación y apoyo continuo.
- Prevención de complicaciones: Un enfoque proactivo en la gestión de la obesidad puede ayudar a prevenir el desarrollo o la progresión de enfermedades asociadas.
La obesidad tipo I puede ser un desafío para manejar, pero con un enfoque integral y personalizado, es posible lograr una mejora significativa en la salud y calidad de vida. El compromiso a largo plazo con los cambios de estilo de vida y el apoyo constante de profesionales de la salud son clave para el éxito del tratamiento.
Grados de obesidad: Obesidad grado I
La obesidad grado II se define por un Índice de Masa Corporal (IMC) entre 35 y 39.9 kg/m². Este rango indica una acumulación significativa de grasa corporal que representa un riesgo aún mayor para la salud en comparación con la obesidad de tipo I. Las personas con obesidad grado II se enfrentan a un riesgo elevado de desarrollar complicaciones graves para la salud, lo que hace que el manejo de esta condición sea particularmente crucial.
Enfermedades asociadas a la obesidad grado II
La obesidad de grado II aumenta considerablemente el riesgo de varias condiciones de salud adversas, incluidas:
- Diabetes tipo 2: El riesgo de desarrollar diabetes debido a la resistencia a la insulina aumenta aún más en esta categoría de obesidad.
- Enfermedades cardiovasculares:La probabilidad de hipertensión, enfermedad coronaria y accidente cerebrovascular se incrementa significativamente debido al mayor estrés en el corazón y los vasos sanguíneos.
- Apnea del sueño severa: La obstrucción de las vías respiratorias durante el sueño puede ser más pronunciada debido al mayor exceso de grasa.
- Algunos tipos de cáncer: El riesgo elevado de cánceres como el de endometrio, colon y mama persiste y puede ser más alto que en la obesidad de grado I.
- Osteoartritis: El exceso de peso impone una carga adicional en las articulaciones, especialmente en las rodillas, caderas y espalda, aumentando el riesgo de osteoartritis.
Manejo médico de la obesidad grado II
El manejo de la obesidad grado II a menudo requiere una aproximación más agresiva que la obesidad de grado I, dada la mayor gravedad de los riesgos para la salud:
Las recomendaciones dietéticas y de ejercicio se intensifican, buscando un déficit calórico más significativo bajo supervisión médica.
El manejo de los aspectos psicológicos es crucial, considerando la relación entre el estado emocional y los hábitos alimenticios.
Dada la gravedad de la obesidad grado II, los pacientes pueden ser candidatos para procedimientos quirúrgicos de pérdida de peso, los cuales se consideran cuando otros métodos han fallado y el paciente cumple con los criterios específicos para la cirugía.
Consideraciones adicionales
- Seguimiento riguroso: Es esencial un seguimiento médico regular para monitorear la evolución del paciente, ajustar el tratamiento según sea necesario y ofrecer apoyo constante.
- Prevención de complicaciones: Una atención proactiva y temprana es clave para prevenir o manejar las complicaciones de salud asociadas con la obesidad grado II.
Grados de obesidad: Obesidad grado I
La Obesidad Grado III, también conocida como obesidad mórbida, se define por un Índice de Masa Corporal (IMC) de 40 kg/m² o más. Este grado de obesidad indica una acumulación de grasa corporal extremadamente alta, que pone a las personas en un riesgo significativamente elevado de sufrir complicaciones graves y potencialmente mortales para la salud. La gestión de la obesidad grado III es crítica y requiere un enfoque multidisciplinario y a menudo intensivo.
Enfermedades asociadas con la obesidad grado III
La obesidad de grado III está asociada con un riesgo altamente incrementado de numerosas condiciones de salud, incluyendo:
- Diabetes tipo 2: El riesgo de desarrollar diabetes es especialmente alto debido a la mayor resistencia a la insulina.
- Enfermedades cardiovasculares severas: El riesgo de hipertensión, enfermedad coronaria y accidente cerebrovascular es extremadamente alto, poniendo en peligro la vida del individuo.
- Apnea del sueño grave:La obesidad grado III puede causar una apnea del sueño severa, que a menudo requiere tratamiento específico.
- Algunos tipos de cáncer: El riesgo de ciertos tipos de cáncer, como endometrio, colon y mama, aumenta aún más.
- Osteoartritis: El exceso de peso puede causar una degradación significativa de las articulaciones, llevando a dolor crónico y limitación de movilidad.
- Problemas psicológicos y de salud mental: La obesidad mórbida también está fuertemente asociada con problemas de salud mental, como la depresión y la ansiedad.
Manejo médico de la obesidad grado III
Dada la gravedad de la obesidad grado III, el manejo requiere una estrategia integral y a menudo agresiva:
Las modificaciones en la dieta y el ejercicio son fundamentales, aunque a menudo insuficientes por sí solas para lograr una pérdida de peso significativa.
El soporte psicológico es crucial para abordar los comportamientos alimentarios, el bienestar emocional y la motivación.
Los medicamentos pueden ser una parte del plan de tratamiento, aunque su eficacia puede ser limitada en casos de obesidad mórbida.
En la obesidad grado III, la cirugía bariátrica se considera a menudo la opción más efectiva para lograr una pérdida de peso significativa y sostenida. Los procedimientos como el bypass gástrico, la manga gástrica, o el balón gástrico pueden ser recomendados, dependiendo de la situación individual.
Consideraciones adicionales
- Evaluación preoperatoria rigurosa: Antes de cualquier intervención quirúrgica, se requiere una evaluación detallada para determinar la idoneidad del paciente para la cirugía.
- Seguimiento a largo plazo: El seguimiento médico, nutricional y psicológico a largo plazo es esencial para mantener los resultados de la pérdida de peso y para el manejo de las comorbilidades.
- Prevención y manejo de complicaciones: Un enfoque proactivo es necesario para prevenir y tratar las complicaciones asociadas con la obesidad grado III.
Tratamientos para todos los grados de obesidad
El tratamiento de la obesidad es multifacético, abarcando desde cambios en el estilo de vida y terapias conductuales hasta intervenciones médicas y quirúrgicas. El enfoque se personaliza basado en el grado de obesidad, la presencia de comorbilidades, y la respuesta a tratamientos previos. En general, los tratamientos se pueden clasificar en:
Cambios en el estilo de vida
Incluyen dieta, ejercicio, y modificaciones conductuales. Son la piedra angular del tratamiento de la obesidad y pueden ser suficientes para los casos leves a moderados.
Terapia médica
Incluye el uso de medicamentos para perder peso. Estos se consideran cuando los cambios en el estilo de vida no han sido suficientes o como complemento de estos.
Cirugía bariátrica
Indicada para casos de obesidad severa o cuando otras intervenciones no han logrado resultados satisfactorios. Incluye procedimientos como la manga gástrica y el bypass gástrico, entre otros.
Manga gástrica
La manga gástrica, técnicamente conocida como gastrectomía en manga, es un procedimiento quirúrgico para la pérdida de peso que reduce el tamaño del estómago aproximadamente al 15% de su tamaño original, formando una manga o tubo. No hay desvío del intestino delgado, lo que significa que la absorción de nutrientes no se ve afectada en la misma medida que en otros tipos de cirugía bariátrica.
¿Cómo funciona la manga gástrica?
- Reducción del estómago: Se extirpa una gran parte del estómago, lo que limita la cantidad de alimentos que se pueden consumir.
- Efectos hormonales: La cirugía induce cambios hormonales que mejoran la saciedad y reducen el hambre, lo que facilita una menor ingesta calórica.
Resultados y beneficios
- Pérdida de peso sustancial: Los pacientes típicamente pierden entre el 60% y el 70% de su exceso de peso en un periodo de dos años.
- Mejora de comorbilidades: Se observa una mejora significativa o la remisión de enfermedades asociadas a la obesidad, como la diabetes tipo 2 y la hipertensión.
Bypass gástrico
El bypass gástrico, o cirugía de Roux-en-Y, es un procedimiento más complejo que implica la creación de una pequeña bolsa estomacal y el redireccionamiento del intestino delgado a esta bolsa, lo que reduce la cantidad de calorías y nutrientes absorbidos.
¿Cómo funciona el bypass gástrico?
- Creación de una bolsa estomacal pequeña: Se conecta directamente al intestino delgado, evitando la mayor parte del estómago y la primera sección del intestino delgado.
- Cambio en la absorción: Al redirigir el intestino delgado, se reduce la cantidad de calorías y nutrientes que el cuerpo puede absorber.
Resultados y beneficios
- Pérdida de peso efectiva: Los pacientes pueden esperar perder entre el 70% y el 80% de su exceso de peso en el plazo de dos años.
- Remisión de enfermedades asociadas: Al igual que con la manga gástrica, hay una mejora significativa en las comorbilidades relacionadas con la obesidad.
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¿Estás en alguno de los grados de obesidad?
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Preguntas frecuentes de grados de obesidad
¿Qué son los grados de obesidad según la OMS?
La Organización Mundial de la Salud (OMS) clasifica la obesidad en adultos en tres grados, basándose en el Índice de Masa Corporal (IMC): Grado I (IMC de 30 a 34.9), Grado II (IMC de 35 a 39.9), y Grado III (IMC de 40 o más), este último también conocido como obesidad mórbida.
¿Cómo se determinan los grados de obesidad por IMC?
Los grados de obesidad se calculan utilizando el Índice de Masa Corporal (IMC), una medida que relaciona el peso en kilogramos con el cuadrado de la estatura en metros (kg/m²). El resultado indica el grado de obesidad y el riesgo asociado para la salud.
¿Existe alguna calculadora de grados de obesidad?
Sí, hay muchas calculadoras de IMC disponibles en línea que te permiten ingresar tu peso y altura para calcular tu IMC y determinar tu grado de obesidad según los criterios establecidos por la OMS.
¿Cuántos grados de obesidad hay según la clasificación de la OMS?
La OMS clasifica la obesidad en tres grados principales: Grado I, Grado II y Grado III, siendo este último la obesidad mórbida.
¿Cuál es el rango de obesidad en adultos?
El rango de obesidad en adultos empieza con un IMC de 30 kg/m² o superior. La clasificación detalla tres grados: Grado I para IMC de 30 a 34.9, Grado II para IMC de 35 a 39.9, y Grado III para IMC de 40 o más.
¿Cómo puedo usar una calculadora de IMC para conocer los grados de obesidad?
Una calculadora de IMC te solicitará que introduzcas tu peso y altura para calcular tu Índice de Masa Corporal. Con base en el resultado, podrás identificar en qué grado de obesidad te encuentras de acuerdo con las clasificaciones de la OMS.
¿Qué significa estar en un grupo de obesidad?
Estar en un «grupo de obesidad» se refiere a clasificar dentro de uno de los tres grados de obesidad basados en el IMC. Este término enfatiza la importancia de considerar el manejo y tratamiento adecuados para cada grado específico de obesidad, reconociendo las diferencias en riesgos para la salud y estrategias de intervención.