Dieta preoperatoria para una cirugía bariátrica (Incluye PDF)

Antes de una cirugía bariátrica, se recomienda seguir una dieta baja en calorías, baja en carbohidratos y alta en proteínas. Esta dieta tiene como objetivo reducir el tamaño del hígado y facilitar la cirugía. La dieta preoperatoria suele incluir alimentos como proteínas magras (pollo, pescado, huevos), verduras de hoja verde, y líquidos claros.

La dieta preoperatoria es un plan alimenticio específico diseñado para preparar el cuerpo para la cirugía bariátrica. Generalmente, esta dieta se inicia unas dos semanas antes de la cirugía e incluye una reducción significativa de calorías y carbohidratos. Se enfoca en consumir proteínas magras, verduras bajas en almidón y líquidos claros para reducir el tamaño del hígado y mejorar la seguridad y eficacia de la cirugía.

Para prepararse antes de una cirugía bariátrica, es crucial seguir las instrucciones de tu cirujano, que generalmente incluyen:

1. Seguir la dieta preoperatoria indicada.
2. Evitar alimentos ricos en grasas y azúcares.
3. Mantener una adecuada hidratación.
4. Abstenerse de fumar y consumir alcohol.
5. Realizar actividad física ligera, según lo recomendado por tu médico.
6. Prepararse mentalmente, lo cual puede incluir la participación en grupos de apoyo o sesiones con un nutricionista.

La dieta preoperatoria para cirugía bariátrica generalmente consiste en:

• Proteínas magras: Pollo, pavo, pescado, claras de huevo, tofu.
• Verduras bajas en almidón: Espinacas, brócoli, col rizada, pepino.
• Líquidos claros: Caldos claros, gelatina sin azúcar, bebidas isotónicas bajas en calorías.
• Productos lácteos bajos en grasa: Yogur griego sin azúcar, leche desnatada.
• Evitar: Azúcares, carbohidratos refinados, alimentos procesados y grasosos.

La cena la noche antes de la cirugía debe ser ligera y fácil de digerir. Una opción ideal puede incluir:

• Una porción de proteínas magras (como pollo a la parrilla o pescado al horno).
• Verduras al vapor o ensalada verde sin aderezos grasos.
• Un vaso de agua o una bebida isotónica baja en calorías.

Es importante seguir las indicaciones específicas de tu cirujano, ya que algunos pacientes pueden necesitar ayunar completamente desde la medianoche anterior a la cirugía.

Para limpiar los intestinos antes de una cirugía, tu cirujano puede recomendar un régimen de preparación intestinal específico, que podría incluir:

• Laxantes orales: productos como el polietilenglicol (PEG) que ayudan a vaciar el intestino.
• Enemas: en algunos casos, se pueden recomendar enemas para una limpieza más profunda.
• Dieta líquida clara: Consumir solo líquidos claros (agua, caldo claro, gelatina sin azúcar) el día anterior a la cirugía.

La dieta preoperatoria es crucial para reducir el tamaño del hígado y facilitar el acceso del cirujano al estómago. Esto reduce el riesgo de complicaciones durante la cirugía y mejora la recuperación postoperatoria.

La mayoría de los cirujanos recomiendan comenzar la dieta preoperatoria entre dos y cuatro semanas antes de la cirugía, dependiendo de la salud y las necesidades específicas del paciente.

Sí, los suplementos vitamínicos pueden ser recomendados para asegurar que no haya deficiencias nutricionales. Consulta con tu cirujano o nutricionista para obtener recomendaciones específicas.

No es necesario evitar los carbohidratos completamente, pero sí debes reducir su consumo. Opta por carbohidratos complejos como los presentes en verduras y granos integrales en cantidades limitadas.

Puedes consumir líquidos claros como agua, caldos claros, té sin azúcar, y bebidas isotónicas bajas en calorías. Evita bebidas azucaradas, gaseosas y con cafeína.

Contar las calorías puede ser útil para asegurarte de que no estás consumiendo más de lo recomendado. Generalmente, la ingesta diaria se reduce a entre 800 y 1200 calorías.

No seguir la dieta preoperatoria puede aumentar el tamaño del hígado, dificultar la cirugía y aumentar el riesgo de complicaciones. Es vital adherirse a las indicaciones de tu cirujano.

Sí, el ejercicio ligero como caminar o yoga puede ser beneficioso, pero consulta con tu cirujano antes de comenzar cualquier rutina de ejercicio durante la dieta preoperatoria.

Si sientes hambre constante, puedes consumir pequeñas porciones de alimentos permitidos con más frecuencia, como claras de huevo, verduras bajas en almidón o bebidas proteicas recomendadas.

Es preferible evitar el café debido a su contenido de cafeína y posibles efectos deshidratantes. Puedes consumir té sin azúcar y sin cafeína, como el té de hierbas.

Bebe al menos 8 vasos de agua al día. Puedes complementar con caldos claros y bebidas isotónicas bajas en calorías para mantener un buen nivel de hidratación.

No hay alimentos específicos para reducir el tamaño del hígado, pero una dieta baja en calorías y carbohidratos, alta en proteínas y con muchas verduras puede ayudar a reducir el tamaño del hígado.

El consumo de frutas debe ser limitado debido a su contenido de azúcar. Opta por frutas bajas en carbohidratos como las bayas, en pequeñas cantidades y según lo recomendado por tu nutricionista.

Incluye proteínas magras como pollo, pescado, claras de huevo, tofu y productos lácteos bajos en grasa. Las bebidas proteicas también pueden ser recomendadas por tu nutricionista.